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Los niños pueden tener elevados niveles de presión arterial incluso desde recién nacidos. De hecho, un 3% de la pobalción infantil presenta hipertensión arterial. Las causas pueden ser tanto hereditarias como por obesidad.

La doctora Empar Lurbe, nefróloga infantil y jefe del servicio de Pediatría del Consorcio del Hospital General Universitario de Valencia, explica que los valores de normalidad de presión arterial dependen de la edad, del sexo y de la talla de cada niño.

La mayoría de casos se deben a la obesidad. Por esto es tan importante que el niño pierda peso, coma adecuadamente y haga ejercicio físico. Aún así, la hipertensión también se puede heredar.


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