Reflujo gastroesofágico
Por Dr.Ricardo Ordorica Flores
Esta enfermedad, de la que actualmente se dice que está de moda, ha sido de gran
controversia en la última década pues parecería que su presentación clínica del
reflujo gastroesofágico en pediatría ha permitido un gran avance en el
conocimiento del mecanismo de funcionamiento del sistema digestivo y de sus
alteraciones.
Sin embargo, hay una gran confusión acerca de qué es el
reflujo, ya que no siempre es una enfermedad.
Del diagnóstico oportuno y tratamiento adecuado de esta
enfermedad depende evitar molestias al niño, angustia a los padres y finalmente
el que no se presenten complicaciones o secuelas a largo plazo.
¿Qué es el reflujo gastroesofágico?
El reflujo gastroesofágico es el regreso del contenido
gástrico hacia el esófago en general de alimento sin digerir.
En los primeros meses de vida pude ser normal y no es
raro hasta un poco de regurgitación de leche cortada.
Cuando se trata de un reflujo simple no se requiere
ningún estudio especial sino de un seguimiento pediátrico estrecho por medio de
su consulta mensual donde se evaluará sobre todo la ganancia de peso y el
aumento talla acompañándose de una exploración completa dirigida a detectar
cualquier evidencia de alarma como sería el ahogamiento o la presencia de una
infección de vías aéreas inferiores por probable aspiración.
¿El reflujo gastroesofágico es siempre una enfermedad?
Si se acompaña cuadros infecciosos frecuentes de vías
aéreas superiores con tos y el niño no gana peso debe considerarse que existe la
sospecha de la enfermedad por reflujo gastroesofágico y se deberán de efectuar
estudios especiales.
¿Cómo se puede llegar al diagnóstico de esta
enfermedad?
La serie esófagogastroduodenal estudio radiológico que
tiene como objetivo verificar la anatomía, no da una idea inicial de la
existencia del problema pero no evalúa la severidad del mismo.
La monitorización del ph esofágico conocida como
phmetría es el estudio ideal para evaluar el grado del reflujo, no es un estudio
fácil de realizar ya que consiste en colocar unos electrodos en el esófago para
medir y registrar en forma continua la existencia de acidez durante un día
completo con todas sus variaciones.
La endoscopía es el único estudio médico que permite
mediante muestras del esófago llamadas biopsias, detectar quemadura por el ácido
del reflujo, además podrán tomarse biopsias del estómago y duodeno para
documentar la existencia de inflamación por otras causas diferentes a la simple
acidez, especialmente por Helicobacter pílori.
Y por último en la evaluación de un reflujo debe
realizarse una gammagrama de vaciamiento que se utiliza para evaluar el
movimiento del estómago mediante leche marcada y poder conocer la movilidad en
lo que respecta a su vaciamiento que debe ser mayor del 60 por ciento a la hora
de haber tomado los alimentos.
¿Cuál es el tratamiento del reflujo gastroesofágico en los niños?
El tratamiento cuando tenemos un reflujo
gastroesofágico simple debe encaminarse a verificar la técnica de la
alimentación del niño, que debe ser semisentado, los orificios de las mamilas
deben permitir el goteo de la fórmula, hacerlo "eructar" a la mitad y después de
cada toma, no movilizarlo bruscamente, que la fórmula esté bien preparada,
mantener al niño en posición boca arriba, es recomendable elevar nuestra cuna
unos 30 grados, en algunos casos es necesario espesar la dieta fraccionarla,
evitar los jugos y los alimentos ácidos y sobre todo mantener una vigilancia
estrecha por su pediatra que decidirá la necesidad de realizar estudios o
iniciar un tratamiento médico específico para el padecimiento.
* Jefe de Servicio de Cirugía Endoscópica
Hospital Infantil de México "Federico Gómez"
Si quiere consultar algún pediatra del cuerpo médico del Hospital Infantil de
México llame al 5 228 9917 ext. 1241, donde recibirá respuesta a sus dudas
Revisado:13/07/10