¿Necesita frenos mi hijo?
Dr. Joaquín Canseco Jiménez
¿Por qué los dientes chuecos?
- Los dientes chuecos se originan por diferentes causas: 1. Hereditario: por semejanza
dentaria o de los huesos de la cara de alguno de los padres. 2. Tamaño dentario: dientes
y molares pequeños o grandes en las distintas denticiones, observándose, espacios o
amontonamiento. 3. Hábitos orales: a) chuparse algún dedo, objetos y cobijas,
considerado normal hasta los tres años y medio de edad. De los cuatro años en adelante,
ocasionará cambios en la forma del hueso maxilar y posición adelantada de los dientes,
así como alteraciones en las funciones del hueso maxilar y posición adelantada de los
dientes y alteraciones en las funciones de masticación, respiración y lenguaje. b)
morderse las uñas: produce desgaste en los dientes y ejercicio pesado para los músculos
de la masticación. 4. Dientes extras o falta de alguno. 5. Traumatismos: con pérdida o
fractura de los dientes. 6. Caries: produciendo destrucción de dientes y molares. 7.
Problemas al nacimiento: como labio y paladar fisurado o cambios en el crecimiento de los
huesos faciales.
- ¿Cuándo es importante iniciar el tratamiento de los dientes mal posicionados y huesos
maxilares?
- El criterio de atención actual establece que cuando sea detectada la malposición
dentaria, como es la forma de juntar los dientes, notoria falta de desarrollo de los
huesos de la cara, descubierta por los papás, pediatra, o dentista, el niño deberá ser
enviado para su revisión al dentista con especialidad en Ortodoncia, que se encarga del
diagnóstico y tratamiento de las malposiciones dentarias que interfieran en el
crecimiento facial, por medio de aparatos y aditamentos (brackets) colocados en los
dientes. El tratamiento se inicia a la edad de cinco años, si el diagnóstico
ortodóncico lo indica. Se aconsejaba hace años empezar el manejo de los dientes no
alineados en el maxilar y mandíbula hasta que hubiesen erupcionado todos los dientes
definitivos a la edad de 13 ó 14 años, lo cual ocasionaba que no se aprovechara el
crecimiento y desarrollo del niño, guiando así la salida de los dientes permanentes a su
posición funcional y estética. Nuestra recomendación es que el ortodoncista sea
certificado por el consejo de la especialidad.
- ¿Qué registros son necesarios para iniciar el tratamiento?
- Radiografía lateral de la cabeza, en donde se efectúan mediciones de los huesos del
cráneo, maxilares y dientes. Radiografías de cada uno de los dientes o radiografía
panorámica en donde observamos todos los dientes en conjunto, huesos maxilar y
mandibular. Fotografías de la cara y boca. Reproducción de los dientes en yeso. El
conjunto de los registros anotados y la historia clínica aportará los datos para el
diagnósticos y plan de tratamiento, individual del paciente.
- ¿Cuáles son las etapas del tratamiento?
- La prevención de la malposición dentaria en niños, consistente en evitar la pérdida
de dientes o molares por caries, porque rompe el equilibrio y función de los dientes
temporales y definitivos. Cuando ocurre la pérdida de algún órgano dentario es
necesario colocar un aparato bucal removible o fijo. Así se evitará el cierre del
espacio, tanto en dentición de leche como en la permanente.
- El tratamiento activo en niños se divide en fases, para no cansarlos. La primera fase,
tiene duración de dos años; de los 6 a los 8 años de edad, en donde el objetivo del
tratamiento es corregir los problemas del hueso maxilar o mandíbula, guiar a los dientes
permanentes a su correcta erupción. La siguiente fase se inicia alrededor de los 13 años
de edad, cuando han salido todos los dientes definitivos, acomodándolos con aditamentos
(brackets) y alambres sobre los dientes; con duración de un año de tratamiento. En casos
severos de mal oclusiones y deformaciones óseas faciales, el manejo es quirúrgico. Se
practica una vez que el paciente ha dejado de crecer; mujeres un año después del inicio
de la menstruación y en los varones a los 18 años de edad. El procedimiento es planeado
por el cirujano maxilofacial y ortodoncista. Se inicia con la alineación de los dientes
en el hueso maxilar y mandibular antes de la cirugía y, una vez operado, el ortodoncista
acoplará los dientes entre sí, con los huesos faciales en posición de función y
equilibrio.
* Jefe del Servicio de Ortodoncia del Departamento de Estomatología
Hospital Infantil
de México Federico Gómez
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