LO NUEVO EN MI PEDIATRA

Las últimas novedades en el campo de la pediatría, en un lenguaje accesible para los padres.


viernes 5 de junio de 2009

LA TELEVISIÓN INTERFIERE CON EL DESARROLLO DEL LENGUAJE EN LOS BEBÉS 

Investigadores afirman que pasar más tiempo viendo la tele significa menos tiempo aprendiendo a hablar

La televisión reduce la interacción verbal entre los padres y los bebés, lo que podría retrasar el desarrollo del lenguaje en los niños, afirma un estudio de EE. UU. que desafía afirmaciones de que ciertos DVD dirigidos a los bebés en realidad los benefician.

Los investigadores estudiaron a 329 niños de entre dos y 48 meses de edad, y encontraron que por cada hora adicional de exposición a la televisión, hubo una reducción de 770 palabras (siete por ciento) escuchadas por los niños de parte de un adulto. El estudio también encontró que mientras más horas pasaban viendo televisión, menos vocalizaciones producían los bebés cuando los adultos les hablaban.

"Algunas de estas reducciones probablemente se deban a que los niños se dejen solos delante de la televisión, pero otras tal vez reflejen situaciones en que los adultos, aunque estén presentes, están distraídos por la pantalla y no interactúan con su bebé de manera discernible", escribieron el Dr. Dimitri A. Christakis, del Hospital Pediátrico de Seattle y colegas.

"A primera impresión, estos hallazgos podrían parecer puramente intuitivos. Sin embargo, estos hallazgos deben ser interpretados a la luz del hecho de que los promotores de DVD para niños afirman que sus productos están diseñados para dar a padres y niños una oportunidad de interactuar entre sí, afirmación que carece de evidencia empírica", señalaron. Los investigadores añadieron que sus resultados podrían explicar hallazgos anteriores de una relación entre ver televisión y un retraso en el desarrollo del lenguaje.

"Teniendo en cuenta el papel crítico que los cuidadores adultos desempeñan en el desarrollo lingüístico de los niños, que hablen o no a sus hijos mientras la televisión está encendida podría ser crítico y explicar los efectos que se atribuyen al contenido o incluso al tiempo de televisión", escribió el equipo. "Esto significa que los padres hablen menos (o no hablen) durante ciertos tipos de programas o en algunos momentos del día podría ser tan importante para este grupo de edad como lo que ven".

Publicado en la Revista Archives of Pediatrics & Adolescent Medicine.

Etiquetas: ,


Publicado por Dr. Roberto Murguia  # 06:06


lunes 6 de octubre de 2008

FRENILLO DE LA LENGUA 

Se produce cuando el cordón del tejido existente debajo de la lengua tiene una longitud poco extensa. Este tejido varía en tamaño entre un individuo y otro. Al nacer la lengua tiende a ser corta y el frenillo muy delgado, aumentando de tamaño con el uso y el lógico crecimiento del niño. Si el frenillo es corto los movimientos de la lengua quedan condicionados y restringidos provocando en algunas ocasiones trastornos alimentarios por déficit en la succión y exceso de salivación y posibilidad de afectar el lenguaje.

Qué tener en cuenta.

Luego del año de vida el niño tiene que tener la capacidad de poder sacar la lengua voluntaria o involuntariamente por afuera de la línea de los dientes o más allá de las encías.

Una prueba muy facil es pedirle al niño que nos saque la lengua, si se esta sale por afuera de esa linea el frenillo tiene un tamaño normal.

NO todo niño con frenillo lingual corto requiere de tratamiento quirurgico, si este no produce trastornos en el lenguaje o la alimentación. En algunos pocos casos puede ser necesario cirugía.

En caso de indicación quirúrgica se esperará una edad superior a los 12 meses de vida o mejor aun luego de los 2 a 3 años de vida.

Como toda operación con anestesia requiere manos expertas del grupo profesional y control de sangrado e infección.

Cuando se plantea una cirugia por frenillo lingual corto

1. Trastornos del habla para la articulación de la palabra en aquellos niños que hayan sido evaluados por un profesional foníatra (fonoaudiologo)

2. Niños con limitaciones mecánicas evidentes (incapacidad para sacar la lengua y, tocarse el labio superior con la punta de la misma, o sacarla más allá de las encías o dientes. Cuando se estira y en lugar de mirarse aguda, en punta, se ve como en forma de V. Y cuando el niño en tiempo de aprender a hablar tiene dificultad para pronunciar aquellos sonidos en donde la lengua debe levantarse para hacer contacto con el paladar, en concreto nos referimos a las consonantes “r”, “rr” y ”l”.

3. Incapacidad marcada para tocar un instrumento de viento.

4. Recién nacidos y lactantes con serios inconvenientes para alimentarse y succionar

Frenillo y lenguaje.

Se requiere de una evaluación muy minuciosa, ya que la gran mayoría de dificultades para pronunciar ciertos sonidos no se deben al frenillo, sino a otros problemas, como los que ocurren por fallas en tejido cerebral neuronal o problemas psicológicos. Asimismo, hay que señalar que en caso de tartamudez la intervención quirúrgica podría incluso empeorar los síntomas. Vale la pena considerar que la intervención quirúrgica es necesaria solo en muy pocas ocasiones y que el niño no debe ser sometido a cirugía sin una segunda opinión por parte de un foníatra o especialista en lenguaje.

Frenillo del labio superior

El frenillo del labio superior es un pliegue de tejido fibroso que se proyecta desde el labio superior hasta la encía del maxilar superior. Las fibras que lo componen pueden pasar entre los dientes incisivos centrales superiores ocasionando la separación de los mismos, tanto en los dientes temporarios como en los definitivos.

Por lo general, cuando brotan los caninos permanentes, la separación entre los incisivos tiende a corregirse, pero si no es así, es posible que la causa de esta separación sea el frenillo.

Siempre se aconsejará la consulta con el odontopediatra antes de realizar su resección.

Por lo general, el frenillo del labio superior no se corrige quirúrgicamente hasta la adolescencia temprana, cuando ya han brotado los caninos superiores definitivos. No es infrecuente el corte traumático.

mipediatra, frenillo, lengua, labio, superior, frenillo labio superior, frenillo lengua,

Publicado en Zona Pediátrica

Etiquetas: , ,


Publicado por Dr. Roberto Murguia  # 04:18


miércoles 17 de septiembre de 2008

LOS NIÑOS BILINGÜES SON MÁS PROPENSOS A TARTAMUDEAR 

Un equipo de investigadores británicos halló que los niños bilingües antes de los 5 años son mucho más propensos que los que hablan un solo idioma a tartamudear y tener problemas para sobreponerse a ese trastorno del habla.

Los resultados, publicados en Archives of Disease in Childhood, surgen de un estudio sobre 317 niños residentes en Londres y sus alrededores, derivados a un especialista para tratar la tartamudez cuando tenían entre 8 y 10 años.

El 22 por ciento era bilingüe, es decir que hablaba inglés y un segundo idioma en el hogar.

Casi el 61 por ciento de los chicos bilingües tartamudeaba, mientras que apenas el 26 por ciento de los niños que no tartamudeaban hablaba dos idiomas, precisó el equipo dirigido por el doctor Peter Howell, del University College de Londres.

La mayoría de los niños bilingües que tartamudeaba lo hacía en los dos idiomas. El trastorno comenzó cuando tenían 4 años; la relación era de cuatro varones por cada mujer.

Tres cuartos de los niños que no tartamudeaban usaban en el hogar sólo el segundo idioma; el cuarto restante hablaba los dos idiomas.

En tanto, la probabilidad de eliminar el trastorno fue menor entre los niños bilingües.

El 25 por ciento del grupo bilingüe dejó de tartamudear a los 12 años y el 55 por ciento de los niños que hasta los 5 años había usado sólo la lengua materna en el hogar o que había hablado sólo inglés, dejó de tartamudear a esa edad.

"Esto sugiere que si un niño usa otro idioma en el hogar, demorar el inicio del aprendizaje del inglés reduce la probabilidad de que comience a tartamudear y mejora la posibilidad de recuperación en la niñez", concluyeron los autores.

Por otro lado, el equipo aclaró que el tartamudeo no afectó el rendimiento escolar.

Publicado en la revista Archives of Disease in Childhood

Etiquetas: , ,


Publicado por Dr. Roberto Murguia  # 01:41

Archivos

enero 2007   febrero 2007   marzo 2007   abril 2007   mayo 2007   junio 2007   julio 2007   agosto 2007   septiembre 2007   octubre 2007   noviembre 2007   diciembre 2007   enero 2008   febrero 2008   marzo 2008   abril 2008   mayo 2008   junio 2008   julio 2008   agosto 2008   septiembre 2008   octubre 2008   noviembre 2008   diciembre 2008   enero 2009   febrero 2009   marzo 2009   abril 2009   mayo 2009   junio 2009   julio 2009   agosto 2009   septiembre 2009   octubre 2009   noviembre 2009   diciembre 2009   enero 2010  


Mi Pediatra   Archivo 2003-2008   Noticias  por temas   Buscar Noticias  Mi Pediatra en Twitter

Visite  Blogger