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Los niños que consumen por lo menos dos porciones de productos lácteos por día tienden a tener huesos más fuertes en la adolescencia.
La leche y otros lácteos están recomendados para la formación ósea infantil. Aun así, los beneficios de largo plazo del consumo lácteo en la infancia se desconocen.
En un nuevo estudio, un equipo de investigadores de Boston University School of Medicine controló a 106 niños a partir de los 3-5 años hasta los 15-17 años. Durante ese período, los padres registraban periódicamente en diarios alimentarios lo que sus hijos ingerían cada día. Una porción de lácteos diario era equivalente a una taza de leche o yogurt, 42,5 gramos de queso natural y 57 gramos de queso procesado.
Al finalizar el estudio, cuando los participantes eran adolescentes, se les realizaron estudios óseos por imágenes.
El equipo halló que los niños que habían consumido por lo menos dos porciones diarias de lácteos tenían un mayor nivel de contenido mineral óseo y una densidad ósea más alta en la adolescencia que aquellos que habían consumido menos lácteos en la niñez.
Los resultados se mantuvieron cuando el equipo consideró otros factores asociados con la densidad ósea y la salud, como el peso corporal, la altura y el nivel de ejercicio.
El equipo dirigido por la doctora Lynn L. Moore publica los resultados en Journal of Pediatrics. National Dairy Council financió parcialmente el estudio.
El cuerpo alcanza su nivel pico de masa ósea durante la adolescencia, confirma el equipo. Aunque la genética influye en gran medida en la calidad ósea de una persona joven, la alimentación y el ejercicio son "contribuyentes modificables cruciales", destaca el equipo.
Los productos lácteos contienen calcio formador de huesos y la leche fortificada es un recurso primario de vitamina D alimentaria, que es esencial para la absorción corporal de calcio, destacan los autores. Existe evidencia también de que las proteínas diarias, especialmente el suero de leche, mejoran la formación ósea e inhiben su fractura.
"Los resultados confirman la importancia de una alimentación rica en productos lácteos y otras fuentes de proteínas para la masa ósea adolescente", concluye el equipo.
Etiquetas: ALIMENTACIÓN INFANTIL, NUTRICIÓN INFANTIL, PEDIATRIA PREVENTIVA
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